Polo y Toño no son garantía

El hecho que sean los que más suenan y encabecen las neoliberales encuestas, no es garantía para que representen los intereses del pueblo nayarita, en el caso, que llegaran a la gubernatura.
 
Si, me refiero a los dos, a Polo y a Toño, mismos que, como lo dijo enfático y categórico el exgobernador Echevarría “son del mismo corral y están herrados con el mismo fierro”.
 
Polo y Toño cojean de la misma pata. Los dos son panistas. Militan en la derecha. Abanderan el fascismo, definiendo a éste, como un fenómeno económico, más que político. Están en el bando del trumpismo (muy de moda en los tiempos que corren), aunque hubiesen, ambos, hecho campaña por la Clinton. Al fin, ¡qué más da!, la demócrata y el republicano, pertenecen a la misma trinchera, a la de los monopolios globales, a la que están adheridos los dos aspirantes nayaritenses, sin lugar a ninguna duda, tal y como lo demuestran, una y mil veces, los hechos de los dos, Toño como hijo de familia saqueadora del patrimonio estatal y, Polo, en su calidad de alcalde, cuyas cuentas y balance, es muy negativo en su carrera política y lo desautorizan en su ruta por la titularidad del Ejecutivo, por más porras que se eche a sí mismo y se autoengañe.
 
Encabezan las encuestas. Cierto. ¿Y eso qué? ¿Encabezar las encuestas los hace infalibles? ¿Encabezar las encuestas los hace, en automático, representar a los trabajadores de Nayarit y defender la soberanía estatal desde la gubernatura? Sin ir muy lejos, Ney también encabezó encuestas y fue pésimo gobernador. Sandoval lideró encuestas y es deplorable gobernador. Peña estuvo siempre adelante en las encuestas armadas por Televisa y es el peor Presidente padecido en México.
 
Existen otros ejemplos. Los más recientes, Hilary y Trump eran los únicos en las encuestas norteamericanas ¿y qué pasó? Eran lo mismo. No representan al pueblo de la Unión Americana. Trump no le servirá al pueblo de los Estados Unidos, como tampoco la señora. Ambos son representantes de los monopolios globales y enemigos de la paz en el planeta, partidarios de una política basada en el guerrerismo y la fabricación de armas, gran negocio de las empresas representadas por los dos.
 
Nayarit necesita un gobernador que le sirva al pueblo; no un enemigo; tal y como, estoy bien seguro, lo serían Polo y Toño. Cualesquiera de los dos, sería un gobernador enemigo del pueblo; enemigo de los campesinos; enemigo de los trabajadores nayaritas; por tanto, estarían de espaldas a la soberanía de Nayarit, ya que ambas cosas, soberanía e interés social, son lo mismo, están íntimamente vinculadas y no se pueden separar una de la otra. Defender la soberanía de Nayarit es defender el interés social de campesinos y trabajadores nayaritas. Defender el interés de los trabajadores del campo y la ciudad en Nayarit, es defender, automáticamente, la soberanía estatal, cuyos conceptos, se definen como el interés nacional y patriótico en la república entera.
 
Sus hechos los delatan. Toño es integrante de una familia que le ha hecho mucho daño a Nayarit. El Grupo Álica representa el saqueo, la explotación y la vil corrupción. Él, nunca va a representar los intereses elevados y superiores de nuestro pueblo.
 
Polo es el peor alcalde que ha tenido Tepic. Hundido en el fango de la corrupción. Deja un saldo muy negativo como primera autoridad de nuestra capital. Dicho cargo lo desautoriza para aspirar a la primera magistratura de Nayarit. Más le valdría declinar por quien abandera a la izquierda, en un acto de consecuencia y honestidad política. Sería un gesto por el bien de Nayarit que enaltecería y elevaría su personalidad tanto humana como histórica. ¿Sería cómo pedirle peras al olmo?
 
El cuadro se complica ahora que el neycismo ha decidido aliarse al layinismo. Ante tal suceso, estamos obligados a tomar decisiones históricas y estructurar un proyecto serio que encamine por la ruta correcta, el desarrollo de la región. De otra suerte, será demasiado tarde y ya ni llorar es o será bueno. Los lamentos se escucharán los venideros cuatro años. Seguiremos en la ruta de tocar fondo y, hasta que toquemos fondo, y, saquemos a Nayarit del atraso….. y hagamos de esta tierra un hermoso paraíso tal y como es nuestra convicción y decisión.
 
Creíamos que con Rigo habíamos tocado fondo pero siguió Toño y luego Ney, para continuar Sandoval y, con Layín de Gobernador, en verdad, sería el acabose. Seguiríamos tocando fondo.
 
¡Pobre pueblo nayarita!
 
Estamos a tiempo. Hay que tomar medidas. En serio y a fondo. Se necesita la gran alianza. Le doy la razón a Naranjo. Ahora más que nunca. Incluso con el PAN. También con Morena. Con todos. Partidos políticos, organizaciones y movimientos sociales, todos, urge que nos juntemos. Inaplazable elevar la mira. Tenemos que cerrarle el paso a la vacilada, la corrupción y la perversidad. Es lo que representa el proyecto Layín y, sin lugar a ninguna duda, ahora se agrava todavía más el asunto aliado con el gobernador más corrupto que hemos padecido los nayaritas, tal cual lo fue, Ney González, odiado por nuestro pueblo y las grandes masas nayaritas, al grado tal, que dicho personaje no puede pasearse por las calles de Tepic y Nayarit, porque la gente es capaz de lincharlo.
 
Transitemos por las veredas de Evo, si Evo Morales el Presidente de Bolivia, que sacó del atraso a su país en pocos años. Evo no se irá, no se puede ir, porque Evo es el pueblo, el pueblo es Evo. Evo es el líder indiscutible de los bolivianos. Es lo que se necesita en Nayarit. Un personaje como Evo. Un líder como Evo. Claro que los hay. José Luis, el del Partido del Trabajo, da el perfil de Evo. No hay otro. Polo no da ese perfil. Toño no da ese perfil. Definitivamente. ¿Sería mucho pedir? No, tal cosa está al alcance de nosotros los nayaritas. ¿Qué tienen los bolivianos que los nayaritas no tengamos?
 
Polo y Toño, por tanto, no son garantía. No representan al pueblo. Necesitamos un perfil que represente al pueblo y a los trabajadores nayaritas. Ellos dos representan lo mismo que Layín. Eso lo sabe muy bien el pueblo nayarita y las grandes masas de nuestro estado.
 
Tenemos que decidir bien. Tenemos que pensarla bien. Es tarea de todos. No sólo de unos cuantos. La política nos toca hacerla a todos. Todos hagamos política. Opinemos. Debatamos. No nos subestimemos. Todos somos iguales.
 
Por lo pronto, ni Polo ni Toño son garantía, por más autoelogios que se eche Polo, con eso de que es el alcalde mejor calificado. El pueblo de Tepic lo tiene bien calificado y reprobado. No pasó la prueba.
 
Pero, en fin, como ya lo dijimos, estamos jugando a las vencidas y la podemos perder, pero, jamás abandonar el barco, porque en la misma nave de nosotros, va, también, todo nuestro pueblo, al que nos debemos y, ofreceremos hasta nuestra sangre, para salvarlo.