Urge la revocación de mandato

Ahora más que ayer urge la “revocación de mandato” para que aquellos políticos metidos a funcionarios del Estado Mexicano que no estén funcionando bien, se les retire del cargo y en su lugar se elijan otros. Y si generalizamos esta práctica, incluiremos a toda la burocracia del sector público aunque no sea funcionario. De paso podemos hacer lo mismo con la burocracia de las universidades e institutos de educación superior. No es para menos la preocupación cuando se nos informa que la deuda pública al cierre del 2014 se situó en 6 billones 948 mil 276.7 millones de pesos lo cual representa el 38.3% del Producto Interno Bruto, PIB. Este adeudo del gobierno del presidente Peña Nieto comparado con el registrado en diciembre de 2012, cuando inició su gestión presidencial, acumuló en los dos años un crecimiento de 29.8%  según la información proporcionada por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, SHCP. Esto significa que la deuda creció un billón 595 mil 482 millones de pesos desde el inicio del actual gobierno. Ello equivale a un aumento de 2 mil 99.3 millones de pesos diarios, en promedio. Si tomamos en cuenta lo que el Concejo Nacional de Población dice de que en diciembre de 2012 el país tenía 117 millones 53 mil 750 habitantes y al finalizar 2014, esa cifra llegó a 119 millones 713 mil 203 personas, entonces la deuda por habitante, sin importar edad, aumentó de 45 mil 729 pesos al inicio del actual gobierno a 58 mil 41 pesos al cierre del año pasado. En sólo dos años el actual gobierno elevó en 5.3% del PIB el endeudamiento del sector público.

Si a esta situación le añadimos la información del secretario de hacienda del recorte presupuestal de más de 120 mil millones de pesos, entonces la preocupación por el destino de este país crece. Tal recorte afectará no únicamente al presupuesto público, sino que impactará en la economía nacional y en la ya menguada condición económica de las familias de los trabajadores mexicanos. Por lo pronto dejarán de circular mercancías por valor de más de 120 mil millones de pesos. Como es de esperarse, se contraerá el sistema económico nacional y de manera directa algunas empresas se verán afectadas junto con los posibles trabajadores de ellas. Seguramente la economía mexicana en su desaceleración no alcanzará a crecer más allá del 2% porque la situación internacional no le es muy favorable a la economía norteamericana de donde somos dependientes como país. Las dos empresas productivas del Estado, Petróleos Mexicanos, Pemex, y la Comisión Federal de Electricidad, CFE concentran 58% del ajuste. Esta situación necesariamente tendrá implicaciones en aquellas compañías de los sectores relacionados con infraestructura así como aquellas enfocadas en participar activamente en proyectos de energía y materiales de construcción. Seguramente se afectarán a firmas como Ica, Grupo Carso, OHL, etc. Sin embargo al parecer 2016 estará peor que 2015.

Analistas del grupo financiero BBVA-Bancomer señalaron que las coberturas petroleras que el gobierno contrató cubrieron 228 millones de barriles (unos 624.6 mil barriles por día), los cuales representan la exposición de los ingresos petroleros del gobierno federal a un menor precio del crudo en relación con el presupuestado, no obstante los ingresos de Pemex quedaron parcialmente descubiertos. De tal manera que en relación con la plataforma de exportación total estimada para 2015 en los Criterios Generales de Política Económica de 398 millones de barriles (un millón 90 mil 410 barriles por día), las coberturas contratadas cubren 57% de esta plataforma. Todos estos factores considerados de manera conjunta permiten que las finanzas públicas estén protegidas en 2015.  Sin embargo, dichos analistas alertaron que el escenario para 2016 luce menos alentador, en ese año no existen coberturas contratadas para cubrir un menor precio del petróleo que el país exporta. De esta forma, en ese año habría un faltante de ingresos públicos para cubrir las necesidades de gasto público esperadas.

Ante este presente y futuro del país, no se puede menos que pedir la revocación de mandato de los actuales funcionarios que está claro que no funcionan. En fin.