Difama, difama, que algo quedará

Cuando se oficializó el triunfo electoral de Andrés Manuel López Obrador (AMLO), a la Presidencia de la República Mexicana, en julio de 2018, salió en las redes sociales un video en donde se ve y se oye a una muchacha llorando desconsoladamente y, al preguntarle alguien detrás de la cámara que la graba por qué llora, la muchacha responde más o menos que porque le van a quitar su casa y su automóvil y todos los demás bienes a su familia.

Claro que bien pudo ser actuado este video; sin embargo, para como se comporta la chica, esta tiene que ser muy buena actriz, porque claramente se mira que está muy compungida, por lo que lo más probable es que si estaba convencida de toda la mala campaña en contra de AMLO que se había dicho sobre él, ya que se decía que traería el comunismo, que México sería como Venezuela, como Cuba, que el dólar subiría a más de 30 pesos y un largo etcétera de funestos vaticinios que, a más de cinco años de estar AMLO en la Presidencia de México, no ha ocurrido nada de todo aquello que se decía, incluso de que se volvió a repetir aquella frase de que era un peligro para México.

Ahora se vuelve a esa campaña sucia, lo curioso es que se está enfocando más en el presidente y en sus hijos más que en la candidata Claudia Sheinbaum, tal vez creyendo los adversarios y detractores de AMLO que por efecto de carambola toda la denostación hacia AMLO se le revertirá a la candidata de Morena; pero el caso es que lo que está pasando con estas campañas sucias en contra de la actual administración federal, es que se a la mejor se está cumpliendo con aquella máxima que las difamaciones, insultos, mentiras y demás cosas malas afectan más a quienes las emiten que a quien van dirigidas.

Y bien se dice que para todo hay gente, pues a pesar de estar probado y comprobado que nada de lo que se decía de AMLO en el 2006, en el 2012 y en el 2018 y posiblemente desde hace muchos años antes, hoy en día sigue habiendo gente que se está creyendo todas las denostaciones y difamaciones en contra de AMLO y su familia; mentiras que se han acrecentado ahora con la ayuda de la inteligencia artificial que, ya está documentado y comprobado, en esta nueva tecnología es han estado apoyando los detractores de AMLO y de la candidata, Claudia Sheinbaum, para sacar videos en donde ponen otras palabras que no son en ninguna forma de lo que dijeron en realidad en el video original. Son unos videos tan bien elaborados y alterados que, por lo mismo, ahora hay que tener mucha prudencia en lo que se ve y se oye, así sea para bien o para mal y no irse con la finta de lo primero que se ve y se oye o en determinado caso, de lo que alguien más nos dice o señala.

Ahora vuelven a subir a las redes sociales un video en donde dos individuos hablan sobre una supuesta nueva Constitución Política para el Estado Mexicano, y que dicen que la misma Claudia Sheinbaum la lleva en el pecho, en donde se dice que todas las industrias y empresas se van a expropiar, lo mismo que con las casas habitación y que se atacará la propiedad privada y cosas por el estilo; un video ya muy gastado y viejo, pues hubo un tiempo que circuló constantemente en dichas redes; sin embargo, como no prendió ni tuvo las expectativas generadas, se dejó de trasmitir, pero tal vez apostando a la desmemoria ya tan evidente que hemos demostrado la mayoría de los mexicanos de ambos sexos, este video lo vuelven a subir a las redes para ver si ahora sí es chicle y pega.

El problema es que varias personas de diversas edades desde adultos mayores hasta jóvenes de las nuevas generaciones y de extractos sociales de media clase para abajo se siguen creyendo todas estas mentiras y, lo curioso es que algunos familiares y conocidos están asustados como si tuvieran industrias o empresas o fueran casa-tenientes y que perderán irremediablemente si sigue la cuarta transformación en proceso.

Ahora con la reforma a las pensiones y que el gobierno federal pide que los fondos de ahorro para el retiro de personas de 70 años de edad que no hayan sido reclamadas se regresen al IMSS y, en caso de que alguien reclame lo que no ha cobrado, se le retribuye y listo, que no hay nada que esconder ni nada turbio y menos que se atente en contra de las AFORES de quienes están inscritos a este fondo. Pero aún con esta clara información, algunos medios informativos, columnistas y en redes sociales afirman que el gobierno pretende quedarse con “todas” las Afores; y por desgracia, hay gente que se cree todo esto. 

Sea pues. Vale.